¡Hola guisantillos! ¿Qué tal todo?
Hoy os traigo una pequeña reseña sobre una serie de DC Comics: Supergirl. O quizás es más una recomendación, no lo sé. En cualquier caso os hablaré de ella.
Supergirl es una serie de televisión creada por Greg Berlanti y Allison Adler y dirigida por Kevin Tancharoen, basada en la historia del personaje femenino del mismo nombre creado para DC Comics por Otto Binder y Al Plastino como parte del universo de Superman.
La serie, estrenada en 2015, cuenta actualmente con tres temporadas, (de las cuales estoy terminando la segunda) y narra la historia de Kara Zor-El; la cual fue enviada a la tierra cuando era una niña para cuidar de su primo pequeño. La nave de Kara se desvió en una especie de agujero espacio-temporal y cuando llegó a la tierra su primo ya era adulto y se había convertido en Superman. Así que él ya no la necesitaba; nadie la necesitaba: el mundo ya tenía a Superman y ella creció a su sombra, ocultando sus poderes. Hasta que un día se ve obligada a usarlos para salvar la vida de su hermana adoptiva, Alex.
Dicen por ahí que Supergirl es más ligera, entretenida y original que otras series de DC. No puedo dar una opinión al respecto ya que es la única que veo pero me pareció un dato curioso para mencionar. Hoy no estoy aquí para hablar de la profundidad de la trama (que se podría decir que es nula), la evolución de los personajes o la bso. No. Hoy quiero hablaros de algunos de los temas que esta serie roza de vez en cuando y llega a tratar y, tal y como podéis intuir por el título, sí, entre ellos está el feminismo, aunque también tenemos la discriminación racial o la representación LGBT, por ejemplo.
Es gracioso pensar que cuando se estrenó la serie llegó a haber quejas porque era "demasiado feminista" e incluso hubo alguna que otra protesta para que dejaran de emitirla (¿¡qué es eso de hacer una serie sobre una super heroína y no solo que no esté sexualizada sino que a demás tenga pinceladas feministas y luche por la igualdad y el respeto?! ¡Qué vergüenza!). A lo largo de los capítulos vemos ejemplos de temas como la discriminación racial o de género, principalmente mediante diálogos muy obvios que, aunque no llegan a calar hondo y hacer reflexionar al espectador, es una suerte que estén ahí, por sutiles que sean, y se agradecen (de hecho algunos podrían pasar totalmente desapercibidos).
Y es que, por desgracia, Supergirl apunta a una dirección muy acertada pero no llega a ser todo lo transgresora que podría; quizás porque está más enfocada para un publico juvenil o pretende ser apta para todos. Aún así, logra dar muy buenos mensajes y dejar un gran ejemplo a seguir, así como darnos un elenco aceptable de personajes femeninos fuertes, independientes y no sexualizados que se apoyan entre sí. Porque si en algo se lleva un sobresaliente Supergirl es en el apoyo que se dan las mujeres: en la sororidad (la amistad en sí es un tema importante en la serie, así como la familia, pero considero importante destacar los ejemplos de sororidad, ya que por desgracia no tenemos muchos).
Cuando Kara comienza su carrera como super heroina es comparada constantemente con Superman. De hecho, la primera parte de la serie se me hizo muy cargante porque no dejaban de hablar de este señor; pero esto es un ejemplo claro de lo difícil que puede llegar a ser destacar en algo para una mujer, especialmente si ya hay un hombre que lo hace. Ella trata de labrarse su propio nombre, conseguir sus propias hazañas y ser valorada por lo que es: una heroína; no la prima de Superman. Aunque esto no se aplica solo a su vida como Supergirl, sino también a su vida personal y laboral.
"- ¿Tienes planes para formar una familia, Supergirl?
- ¡Nadie le hace esas preguntas a mi primo!"
Otro gran ejemplo de "agenda feminista" es Cat Grant, la jefa de Kara, probablemente mi personaje favorito y el que mejores "lecciones" nos deja mediante sus conversaciones con la protagonista. Cat es una mujer importante e influyente que creó en mayor imperio de los medios de comunicación en National City. Ella tiene frases tan acertadas y críticas como "si un hombre ser queja se desahoga, si lo hace una mujer es una histérica", así como muchas otras en las que deja claro que una mujer siempre tendrá que esforzarse el doble o el triple para destacar o ser siquiera reconocida.
"No soy la mujer más poderosa e influyente de National City. Soy la persona más importante e influyente de National City."
"¿Y qué tiene de malo la palabra "Chica"? Yo soy una chica, y tu jefa, y poderosa, rica, sexy y lista. Así que si crees que "Supergirl" es menos que excelente, quizás el problema lo tengas tú."
También es importante hablar sobre las relaciones que mantiene Kara con los demás personajes que la rodean, como su hermana o sus amigos. Algo que hace muy bien la serie es reflejar que, por haber tratado bien a una mujer (es decir, tratarla como a una persona) ella no te debe nada. La famosa "friend zone" se trata en la serie de un modo correcto, sin dejar en ningún momento a la mujer como "la mala" por no estar enamorada del chico que la trató como un ser humano.
La relación de Kara y Alex creo que es mi favorita. Adoro cada escena que tienen juntas, como se protegen mutuamente y se brindan ese apoyo incondicional. Pero no todo es acción y cazar alienigenas; también tienen sus momentos de flaqueza en los que se consuelan y se cuentan cosas sobre su vida, se sinceran etc. Lo que es una relación amistoso-fraternal sana, fuerte y consolidada.
Por desgracia no todo es maravilloso en esta serie y, como de costumbre, parece necesario que haya un interés romántico que es pésimamente llevado durante la primera temporada y que parecen estar arreglando en la segunda. SPOILER. Aunque actualmente la serie ha tomado el rumbo de "todos tenemos pareja, ya somos felices" sin casi darme cuenta; lo cual no acaba de convencerme. SPOILER. La parte buena es que las relaciones que se presentan son buenos ejemplos de relaciones sanas, y eso siempre está bien, porque tampoco son muy habituales.
"¡Estoy harta de tu ego masculino y de tu actitud paternalista! ¿¡Por qué no puedes estarte quieto y hacerme caso por una vez!?"
Algo que me llamó mucho la atención es el complejo de inferioridad que tienen todos los hombres (a excepción de uno) que rodean a Kara. ¿A qué se debe esto? A que Kara no necesita un hombre que la defienda, ella es la mujer de acero, y eso hace que los tíos de su alrededor se sientan intimidados y despojados de su rol de género, pierden su rumbo: sencillamente no saben que hacer. SPOILER. Algo que me pareció realmente llamativo con la aparición de Guardián, que parece nacer para reivindicar su posición de hombre para sentirse importante. Algo que por cierto también molesta mucho a Kara, aunque a ella también se le huelen los motivos, porque por muy santa que sea le gusta ser el centro de atención. SPOILER. Esto, por desgracia, es un problema real del que cada día se ven ejemplos, como si los hombres solo estuvieran ahí para ser los fuertes y defender a las mujeres, que somos las débiles; todo en esta sociedad apunta a que no puede ser al revés y al toparse con una situación a la inversa, a algunas personas simplemente se les rompe el fusible.
Kara, en su papel de heroína, también juega un poco el papel de "la luz de la esperanza"; algo bastante típico en personajes femeninos. Ella intentará buscar siempre la solución que considera más justa y menos perjudicial para todos, anteponiendo siempre la vida y bien estar humano o alienígena a sus propósitos (como puede ser atrapar a un delincuente). El diálogo siempre es el primera opción para Kara, así que podemos decir que es una super heroína de acción y diplomática; defensora de que las cosas pueden arreglarse hablando, con tolerancia y respeto. Aunque, en mi opinión personal, a veces lleva demasiado lejos esa cualidad; lo cual contrasta con su hermana Alex, la cual parece tener siempre sangre fría para determinados trabajos y otras veces es tremendamente impetuosa. (¿He mencionado ya que adoro sus escenas juntas?).
Otro punto que me parece muy interesante es la representación de la mujer a nivel físico. Por desgracia, y como ya estamos acostumbradas/os todas/os, la variedad de cuerpos en televisión (especialmente los femeninos) son más bien escasos, y Supergirl no es una excepción a esto. Pero sí que tiene una cosa queme gusta mucho: las mujeres de esta serie no temen enfadarse. ¿Qué quiero decir con esto? Bueno, lo explico un poco más a fondo en mi entrada sobre la sexualización: básicamente es dejar de estar perfecta, aunque sea durante un breve periodo de tiempo. Si hay que llorar lloran, si tienen que gritar gritan y si tienen que hacer en mayor esfuerzo de su vida con sus consecuentes muecas nada atractivas las hacen.
Me refiero a cosas como estas, que no abundan. ¿No sale especialmente favorecida, verdad? |
Aunque fuera de estos momentos nuestras protagonistas son siempre fabulosas no se nota un esfuerzo tan forzado porque esto sea así; las cámaras las tratan como personas, sin cosificarlas, y el maquillaje que llevan la mayor parte del tiempo es muy natural, por lo que no vivirás momentos absurdos como irse a dormir con un ahumado en los ojos y los labios de carmín. Y esto, no sé si solo lo noto yo, pero el maquillaje de Kara a Supergirl cambia, por lo que me da la sensación de que a la heroína si que intentan hacerla un poco más atractiva.
Por supuesto entre todo esto también tenemos la típica escena de mujer probándose ropa/héroe escogiendo su traje. Pero no creo que sea algo de lo que valga la pena hablar.
" Cariño... ¿por qué me iba a decepcionar tu homosexualidad?"
En su esfuerzo por la diversidad, Supergirl también cuenta con representación del colectivo LGBT. Es escasa. Escasísima. Pero al menos es algo. No voy a tirar cohetes, pero tampoco voy a quitarles el mérito y decir que lo hayan hecho mal, ya que me parece que han tratado el tema bastante bien. No quiero hablar mucho de ello porque sería spoiler, aún así tened presente que al menos dos personajes no son heteros. Quizá en un futuro la serie nos sorprenda y amplíe el catálogo.
Respecto al racismo, no soy la persona adecuada para hablar de ello. Es cierto que la serie cuenta con personajes importantes negros pero ahí se queda. Creo recordar que hay un asiático trabajando en el DEO (Departamento de Operaciones Extra-Normales) y de vez en cuando lo ves por ahí. Así que en cuanto a representación racial también se queda corta. Ahora bien, considero que crean situaciones muy interesantes con el racismo hacia los alienígenas; ya que la mayoría llegan a la Tierra buscando refugio, huyendo de la guerra y el hambre, y mucha gente los tacha a todos de criminales, pidiendo que sean exterminados o que regresen a sus planetas. ¿Veis por dónde va el asunto? Creo que es muy obvio. También hay razas de alienígenas que se odian entre ellos, por supuesto, y gente con muchos, muchos prejuicios.
En definitiva: estoy muy contenta con esta serie (si lees esto, Yael, gracias por recomendármela); y me alegra más que sea apta para todos los públicos, ya que transmite mensajes muy, muy positivos sobre la tolerancia, la diversidad sexual y racial, la superación personal y auto-aceptación, así como la búsqueda de identidad, la sororidad, compañerismo y el amor (no solo romántico, sino en general: amistad incluida, que ya dije que es algo muy importante en Supergirl). Y por supuesto, sus toques feministas, que son bien necesarios, aunque a tantas personas parezca molestarle (que precisamente son las personas que más necesario lo hacen).
Nunca imaginé que acabaría tirándole piedras a Diana y encantada con algo que tuviera relación directa con Superman, pero aquí estoy. Porque sí, el título de la entrada hace una ligera referencia a la película de Wonder Woman; de la cual ya hice una reseña que os dejaré por aquí.
Nada más que añadir por hoy, salvo que me deis vuestra opinión sobre la serie, ya sea porque la habéis visto o por lo que esta entrada os evoca.
Muchas gracias por pasaros, leer y comentar. ¡Un saludo y hasta la próxima!
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